Aún sin poder calcular por completo los daños que la tormenta Sandy dejó en Nueva York y New Jersey, las oportunidades para quienes trabajen en construcción y reparaciones, y servicios de transporte saltan a la vista. La Agencia Federal de Emergencia ha declarado ambos estados como zonas de emergencia, lo que abre la posibilidad a sus residentes afectados solicitar ayuda del gobierno para alquilar temporalmente viviendas, hacer reparaciones de emergencia en sus hogares, reponer bienes dañados y recibir préstamos para recuperar pequeños negocios y cubrir pérdidas en cultivos. Una gran demanda de mano de obra calificada se espera en los próximos meses, especialmente en las costas de New Jersey y Lond Island, donde ha habido graves daños materiales. Esto abre una posibilidad laboral para una gran cantidad de latinos que trabajan como jornaleros, así como contratistas de las agencias de mantenimiento del gobierno que requerirán de una mano extra para cumplir con las labores de limpieza
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