Reacción de NDLON antes de la introducción del proyecto de ley sobre inmigración: “Esperemos hasta el final antes de aplaudir”

Los Angeles, CA. – Antes de la introducción de la propuesta “US Citizenship Act” de 2021 del presidente Biden, Pablo Alvarado, codirector ejecutivo de la Red Nacional de Jornaleros (NDLON) emitió la siguiente declaración:

“Hay una línea de una vieja canción de blues que dice así: ‘Cuando has estado deprimido tanto tiempo, todo empieza a lucir bien …’ Y ese es ciertamente el caso de los inmigrantes después de cuatro años de Trump y una pandemia que ha sucedido una sola vez en un siglo, matando a nuestras familias a un ritmo desproporcionado. Pero debemos resistir la tentación de aplaudir las promesas que podrían no cumplirse.

“Si bien la Administración Biden es ciertamente una mejora con respecto a las dos últimas administraciones, aún se necesita mucho más liderazgo presidencial, y una velocidad de reacción más rápida, para aliviar la crisis de derechos humanos doméstica ocasionada por décadas de una política estadounidense brutalmente injusta hacia inmigrantes y refugiados. La turbulenta implementación de su agenda para una reforma migratoria debería ser un llamado de atención para todos los que estamos directamente afectados por el fracaso del gobierno, para unificarnos, alzar nuestra voz y exigir nuestros derechos en lugar de esperar a que otros hablen por nosotros y para nosotros . Ya es suficiente.

“El presidente Biden tuvo la oportunidad de presentar su proyecto de ley, enérgicamente, en CNN esta semana, y no lo hizo. Debe hacerlo mejor. Aparte de hablar sobre su estrategia de “50 votos” a través del dividido Senado de los EE. UU., debe liderar con el ejemplo, tomando medidas hoy, para ayudar a los inmigrantes que mantienen las luces encendidas en este país durante una de sus horas más oscuras “.

Chris Newman, consejero general de NDLON agregó:

“Los pasos que el presidente Biden puede y debe tomar hoy para complementar la introducción de esta legislación incluyen los siguientes:

1) Emitir una orden ejecutiva que deje en claro que, durante los próximos cuatro años, la administración evitará la deportación de cada persona que califique para una eventual ciudadanía bajo esta propuesta. La Corte Suprema ha señalado que esto sería un ejercicio legítimo de autoridad y no hay razón para esperar;

2) Haga una promesa clara e inequívoca de incluir a todos los supuestos beneficiarios de este proyecto de ley en los paquetes de ayuda de COVID que se aprobarán mediante la conciliación presupuestaria. Esto debería incluir acceso a beneficios y autorización de trabajo para todos (¡no algunos!) Inmigrantes que calificarían para recibir ayuda bajo este proyecto de ley;

3) Poner fin al experimento fallido (emprendido por la administración Obama) que reclutó a un sistema de justicia penal plagado de racismo sistémico como ejecutores de primera línea de las leyes de inmigración que en sí mismas son claramente racistas. La administración tiene experiencia y cobertura política más que suficiente para apagar programas como Comunidades Seguras, 287g, y sus descendientes. El momento de esta acción fue ayer;

4) Restaurar y expandir el TPS en la máxima medida permitida por la ley y, en el proceso, proporcionar autorización de trabajo a millones de inmigrantes que no pueden regresar a sus países de origen debido a un desastre o una pandemia. Nuevamente, esto debería suceder sin demora; e

5) Instruir a los secretarios Mayorkas y Walsh para que presenten un plan conjunto para desconfigurar la aplicación de las leyes laborales y migratorias, entre otras cosas, incentivando a los trabajadores inmigrantes a denunciar abusos a través de programas de denuncia de irregularidades que otorgan autorización de trabajo a todos los que den un paso al frente.

“Precisamente porque el país enfrenta emergencias intercaladas sin precedentes, la Administración Biden no puede esperar a que un Congreso dividido se reforme antes de tomar medidas sensatas que revertirán el daño causado en los últimos años. Se requiere liderazgo presidencial para unificar al Partido Demócrata y al país, y cuanto más espere Biden para proporcionar, más difíciles serán las aspiraciones establecidas en esta legislación ”.

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